El martes 12 de diciembre, las 9:30 de la noche el estadio de béisbol Beto Ávila se iluminó cuando el Sol de México salió al escenario y deleitó a miles de fanáticos con un concierto inolvidable,ante los gritos de miles de fanáticos que empezaron a llegar al estadio desde muy temprano para asegurar un lugar lo mas cercano posible.

. El recinto, recién remodelado , se convirtió en el lugar perfecto para una experiencia musical única, con una producción enorme de luz y sonido.

Luis Miguel, conocido por su impecable voz y carisma en el escenario, no decepcionó a su público veracruzano. El concierto comenzó con una energía arrolladora, con el artista interpretando algunos de sus éxitos más conocidos que han dejado huella a lo largo de su destacada carrera, como: "Será que no me amas" y "Amor, amor, amor".

El repertorio incluyó clásicos como "Suave", "Culpable o no", "Hasta que me olvides" y "Dame", entre otros grandes éxitos que resonaron en todo el estadio, acompañados por la ovación y el coro de los fanáticos que coreaban cada palabra.

El montaje del escenario, las luces y la calidad del sonido contribuyeron a crear una experiencia única. El equipo de producción logró capturar la esencia de la música de Luis Miguel, transportando a la audiencia a través de sus baladas románticas y boleros inolvidables.

Con su estilo característico y elegante, cantó a la multitud, creando momentos memorables que quedaron grabados en la memoria de sus seguidores.

El climax sucedió cuando salió a escena el mariachi y el Sol interpreto temas clasicos mexicanos como "Echame a mi la Culpa", " La media Vuelta ", "La Bikina", "Mexico en la Piel " y otros .

El publico , sobre todo las feminas salieron felices de haber vivido una noche magica escuchando a el idolo de todas muy de cerca y en su terruño.